No hay nada que defina mejor a un país que la comida. Cuando nos acordamos de un lugar, no podemos evitar pensar en los olores y sabores distintos que probamos en el viaje, así que si vienes de visita a Chile y no sabes por dónde partir, acá tienes una lista de curiosas preparaciones que puedes encontrar en Chile.
1. Completo
Si, puedes decir que es sólo un pan con muchas cosas adentro, pero para un chileno el completo es más que eso, es una mezcla de sabores perfecta. El completo original lleva: vienesa, tomate, salsa americana, chucrut y mayonesa; pero sin duda la variación más popular es el italiano, que a parte de vienesa, tomate y mayonesa, lleva palta. Es tanto el amor de los chilenos por esta preparación, que hasta existe el día del completo (25 de mayo).
¿Dónde Comerlo?
En casi cada calle de Chile. Se pueden encontrar con infinitos ingredientes, precios y formatos; pero cuenta la leyenda que los primeros completos chilenos (adaptados de los hot dog estadounidenses), nacen en 1920 en el Portal Fernández Concha, que puedes encontrar rodeando la Plaza de Armas en Santiago. No son los más finos, pero siguen siendo ricos y baratos.
2. Chorrillana
Este plato típico de los bares chilenos, es básicamente una fuente grande de papas fritas con muchas cosas encima: cebolla frita, longaniza, carne de vacuno y por si no era suficiente frito… un par de huevos fritos encima. Una preparación sencilla, que contiene todas las calorías de mundo y que además generalmente se acompaña con cerveza. Por favor, no te comas este plato solo, porque por lo grande que es está diseñado para compartirse.
Chorrillana típica en El J Cruz, Valpo
¿Dónde Comerla?
Se dice que la chorrillana nació en Valparaíso, así que la recomendación es comerla en alguna “picada” porteña, como el restaurant El Pimentón o El J Cruz.
3. Milcao
El Milcao es una comida típica de la isla de Chiloé, en el sur de Chile. Se prepara a base de papas (cocidas y hechas puré, más papas ralladas y crudas), manteca, sal y chicharrones de cerdo. Todo esto se moldea en forma de pan y se hornea o fríe. El milcao es considerado el pan del sur de Chile, así que se puede comer solo o como acompañamiento.
¿Dónde comerlo?
En Chiloé, preferentemente no en restaurantes. Es mejor comprarlo en los mercados o ferias, a las señoras que los hacen en su casa. Un buen lugar para comerlos es en el Mercado de Castro, donde también venden otras preparaciones típicas de Chiloé.
4. Curanto en hoyo
Sigamos en Chiloé, el curanto es una preparación del pueblo originario Mapuche, que para hacer frente al mal clima del sector, pensó en hacer un horno bajo tierra. La forma tradicional de prepararlo es excavando un hoyo, en el que se introducen piedras y brasas, para generar una fogata, hasta que las piedras están al rojo vivo, que es cuando cesa el fuego y se introducen los ingredientes. Abajo van los mariscos, luego las carnes, después las verduras, milcaos y chapaleles, todo finalmente tapado con hojas de nalca. Esta compleja preparación requiere de mucha paciencia y experiencia de quienes lo cocinan.
¿Dónde comerlo?
Si no tienes la suerte de que una familia chilota te invite a presenciar el ritual de cocinar un curanto al hoyo; puedes comerlo en alguna cocinería tradicional de Ancud, ya que es en esta parte de la isla de Chiloé, donde se dice están los mejores, más típicos y más baratos.
5. Porotos con riendas
Este plato es una tradición del campo chileno. Se prepara con porotos, tallarines, longanizas y zapallo. Antes de que fuera adaptado para un gusto más citadino, se usaban tiras de cuero de chancho en vez de tallarines, de ahí el término “riendas”. Este plato era preparado en tiempos de escasez, en donde el chancho debía consumirse completamente y los platos tenían que aportar la mayor cantidad de calorías posibles. Los porotos con riendas siempre están presentes en las casa de los chilenos, principalmente en el invierno.
Poroto con mazamorra de El Palacio del Poroto (General Amengual 494, Estación Central)
¿Dónde comerlo?
En el centro de Santiago, en la comuna de Estación Central existe El Palacio del Poroto con Riendas, una “picada” bien chilena que ofrece este plato durante todo el año.
6. Machas a la parmesana
Sabemos que es raro mezclar mariscos con queso, pero en serio, es super rico. No hay mucho que contar sobre su preparación, es bien simple: se abre la macha, se le pone queso, un chorrito de vino blanco y al horno. Acá lo importante es que los productos base estén frescos y sean de buena calidad.
¿Dónde comerlas?
En calle Ricardo Cumming 221, en Santiago, está el restaurant Ocean Pacific’s, que tiene unas estupendas y contundentes machas a la parmesana. Además es un espacio impresionante, que está ambientado como si estuvieras mar adentro o en un submarino. Y por si no lo sabías, este local es uno de nuestros Stasher Points, así que cuando vayas a dejar tu maleta, para pasear tranquilo por Santiago, puedes aprovechar de pedir este plato y unos cuantos más.
7. Mote con Huesillo
Ni siquiera nosotros los chilenos sabemos si es un postre o es una bebida, lo que sí sabemos es que es delicioso y lo más refrescante que puedes encontrar en un día de calor. El mote con huesillo se prepara a base a duraznos deshidratados (huesillos) hervidos en azúcar, canela y especias, mote de trigo cocido y jugo de la misma preparación. Se toma heladísimo y como también se come, se sirve con cuchara.
¿Dónde comerlo?
El mote con huesillo, se vende en carritos en la calle. Donde más se ve es en Santiago, pero también se encuentra en verano, en las playas del litoral. Pero si vamos a hablar de excelencia, la “picada” El Rey del Mote Con Huesillo (General Rondizzoni 2420, Santiago), tiene bien puesto su nombre. Contundente y barato.
8. Chumbeque
El chumbeque es un dulce de tres capas de galleta, con relleno de miel de limón o mango y es típico de la ciudad de Iquique, en el norte de Chile. Nace como la adaptación de una antigua receta familiar de turrón cantones (que la familia Koo trajo a Chile en la época salitrera), mezclado con frutas tradicionales de Tarapacá.
¿Dónde comerlo?
El chumbeque sólo se puede comprar en el norte de Chile y es una marca registrada por la empresa «M. Koo». Por todo Iquique (y el resto de Chile) puedes encontrar imitaciones, pero te recomiendo comer los originales, que se fabrican en Eleuterio Ramírez 949, Iquique.
9. Sopaipillas
Las sopaipillas son una preparación que cruza todo Chile, es simplemente una masa frita en forma de pan, que se hace con harina de trigo, manteca y zapallo cocido. Su variación más curiosa son las tradicionales “sopaipillas pasadas”, que además de fritas, están bañadas en una mezcla de chancaca (caña de azúcar no procesada), naranja, canela y clavo de olor, ideal para pasar el invierno.
¿Dónde comerlas?
Es muy usual ver carritos que las venden en la calle, pero esas casi nunca tienen zapallo, un ingrediente importante en el sabor (aunque igual son ricas). Si quieres probar unas auténticas, lo mejor es pedirle a un amigo chileno que las haga en su casa. En Santiago también hay muchos locales nuevos que han agregado las “sopaipillas pasadas” como parte de su carta de postres, como: El café de la Candelaria en Av. Italia o el restaurante Rescoldo en calle Lastarria. La clave cuando las compres está en preguntar por el zapallo.
10. Pastel de choclo
El pastel de choclo es un plato salado que se prepara con maíz tierno molido en forma de puré, sazonado con hierbas como la albahaca y especias como comino y pimentón dulce. Esta base se añade sobre un “pino” o picadillo de carne, cebolla y ajo, además de aceitunas, huevos duros y trozos de pollo. Se lleva al horno hasta que la parte superior del pastel está dorada. Todo esta mezcla es como una explosión de sabores.
¿Dónde comerlo?
Esta preparación se come tradicionalmente en pocillos individuales hechos de greda, que se hacen en el pequeño pueblo de Pomaire, ubicado en la Comuna de Melipilla (a 50 kilómetros al oeste de Santiago); así que en este lugar, se han convertido en expertos en la preparación del pastel de choclo. Todos los que puedes encontrar en los muchos restaurantes del sector son ricos, pero se dice que los mejores se comen en restaurante El Cototudo o en Los Secretos de Anita.
Ahora lo único que falta es que salgas a probar estas mezclas riquísimas de sabores. Es verdad, todo tiene harta masa y fritura, pero en Chile hay muchos cerros y playas para recorrer después de comer. Deja tu equipaje en un lugar seguro con Stasher y disfruta tu viaje.
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