El desafío de viajar sola/o por primera vez

El desafío de viajar sola/o por primera vez

La primera vez que tuve que viajar sola, fue por trabajo. Antes había hecho sólo dos viajes en avión; el primero cuando tenía 11 años, con mis papás y el segundo un mes antes de irme sola, cuando en un arranque de ansiedad, compré pasajes a modo de prueba, porque me dio terror no saber como moverme en un aeropuerto y terminar faltando al trabajo, al otro lado del Continente.  

En esos años viajar no era un item importante en mi vida y, es más, ni siquiera estaba muy convencida de hacerlo. Así que si te pasa lo mismo y todavía no tomas la decisión, te voy a tratar de convencer.

Viaja solo/a aunque no estés seguro de querer hacerlo

Por supuesto que conocer cosas nuevas da miedo y más si no tienes en quien apoyarte. La gente que viaja sola, siempre te dice que esta experiencia va a cambiar tu vida, yo también pienso eso, pero puede que tú no. Todavía. (lee nuestro arículo sobre cómo llenar el tiempo en el aeropuerto)

Te ha pasado que cuando haces algo nuevo, sientes un pequeño orgullo interior, como si te hubieras ganado una estrellita?. Cuando estás viajando solo ese sentimiento es constante: No perdí el avión = estrellita, encontré dónde dormir = estrellita, hablé con un desconocido = estrellita, me comí un helado solo = estrellita. O sea, es un cariño a ti mismo que durará varios días y te vas a dar cuenta, que hay muchas cosas de tu vida normal, que antes dejabas de lado por no tener con quién hacerlas.

No le tengas miedo a los lugares

El primer viaje sola que hice, fue a Colombia. Iba a estar un mes en ese lugar que aparecía constantemente en las noticias. La gente me hablaba de la guerrilla, de las drogas y de los secuestros. Pero los lugares no son como te los muestran en la televisión. Colombia resultó ser un lugar muy tranquilo, ordenado y con gente hermosa.

Así que, no creas que los lugares son como en las películas. Probablemente tu ciudad sea más peligrosa que la ciudad adonde vas (al menos para los latinoamericanos) y cada día trabajas, sales de noche y vives en ella.

Por supuesto que hay que evitar lugares peligrosos e investigar antes de ir a ciertos barrios, pero nada más.

Nada te da más seguridad que saber dónde estás

Si te da miedo llegar por descuido al lugar más peligroso de la ciudad o no quieres que un taxista haga una ruta demasiado larga, investiga.

Antes de emprender tu primer viaje solo, recorre la ciudad con Street View de Google Maps. Averigua cuales son los barrios donde no quieres estar y márcalos en tu mapa. Baja un mapa offline en tu teléfono para que siempre sepas donde estás y si tomas un taxi, puedas guiar al taxista como si conocieras la ciudad.

En tus próximos viajes, te vas a ir soltando; pero no tengas vergüenza de querer saberlo todo antes de partir. El saber te va a dar herramientas para sentirte más confiado y seguro.

Destruye la barrera del idioma

Quizás hace algunos años el no saber un idioma podía ser una excusa para no ir a algunos lugares. En estos días la tecnología nos ayuda a entender lo que dice casi cualquier persona en el mundo. Hay aplicaciones como Google Translate, ITranslate o SayHi, que te pueden ayudar con eso.

Otra buena forma de entender la cultura y acercarte a los locales, es aprender algunas palabras básicas en el idioma del país que visitas. Decir “hola”, “chao” y “gracias”, en cualquier parte, son palabras mágicas y la puerta para hacer nuevos amigos.

No le tengas miedo a la soledad

Quizás muchas personas que viajan solas, te han dicho que vas a conocer mucha gente durante el viaje. La verdad es que eso depende de tu personalidad, pero las probabilidades aumentan si sigues ciertas claves.

Los hostales y bed & breakfast, son mejores que un hotel para conocer otras personas que viajan solas. Pasa tiempo en las zonas comunes y vas a ver como más de alguien te habla. Pide datos sobre la ciudad y si te invitan a algún lugar o a compartir una cerveza, acepta. Nada mejor que gente que está haciendo lo mismo que tú.

Para conocer gente nueva, una buena forma es apuntarte en un tour guiado, en cada ciudad hay varios free walking tour, en los que vas a encontrar mucha gente sola. También ir a un pequeño curso de comida o de manualidades tradicionales, va a aumentar tus probabilidades de conocer gente.

Sé honesto, pide ayuda y habla con extraños. Salir de la zona de confort, hace que nos atrevamos a hacer cosas distintas. En mi último viaje al sur de Chile, por ejemplo, estaba tan desesperada por tener un transporte que cruzara la frontera hacia Argentina desde Pirihueico, que le hablé a una pareja de personas mayores que caminaban por un parque nacional. Resultaron ser los únicos que cruzaron la frontera en auto ese día y gracias a que les hablé, pude cruzar con ellos.

Si no te gusta comer solo, comparte

Un miedo muy común es el comer solo. Para combatirlo, por ejemplo, busca restaurantes que tengan barra, así al menos puedas conversar con el bartender. También puedes ir a restaurantes con mesas comunes, busca «mesas compartidas» en internet y vas a encontrar lugares en cada ciudad. Otra opción es apuntarte en cenas organizadas, en las que todos entran en un mismo lugar a la misma hora (en restaurantes o casas particulares). Una pagina que ayuda con esto es MealSharing, pero también puedes encontrar estos eventos en Facebook.

Cuidate

Para que tu experiencia sea buena y la quieras repetir, evita ponerte en situaciones de riesgo. Por ejemplo, no llegues a tu destino de noche. De noche es más difícil ubicarse en un lugar nuevo y si no tienes tu alojamiento o si algo sale mal con tu reserva, va a ser más complicado encontrar otro lugar.

Lleva un candado, especialmente si vas a compartir dormitorio con más gente. Así puedes cerrar tu equipaje o dejar tus cosas de valor en los lockers del hostal.

No cargues más de lo necesario. Vayas donde vayas, si necesitas algo, lo vas a poder comprar. Además si tienes menos cosas, el miedo a perderlas es menor y tu espalda te lo va a agradecer. Y si estás de paso por una ciudad, busca un Stasher Point cercano y deja tu equipaje por el día, el andar más liviano, te va a hacer más rápido y no vas a estar tan cansado, por lo que puedes aprovechar más la ciudad.

Escanea tu pasaporte y los documentos importantes del viaje y mándalos a tu email. Así, si los pierdes, los podrás recuperar más fácilmente.

Haz tu viaje más agradable


Cuando viajes solo, van a haber varios tramos en los que te vas a sentir solo, para eso procura tener ayuda. Lleva música que te haga feliz, ten una libreta de notas, lleva un libro o varios libros electrónicos y saca muchas fotos para cuando quieras compartir tu viaje con otros.

Elige un lugar fácil para ti

En tu primer viaje sola/o, no te exijas. Si piensas que un viaje a Asia o a Europa, es mucho para ti, empieza de a poco. Prueba con unos días en un lugar dentro de tu país que aún no conozcas o intenta visitar uno de tus países vecinos. Cada uno de nosotros tiene sus tiempos. El problema es cuando no lo intentamos nunca.

Seguro que ya habrás notado que a la gente le cuesta menos acercarse a ti cuando estás solo: porque lo cierto es que cuando estás solo eres mucho más accesible. No le des tantas vueltas a tu decisión, ¡atrévete y disfruta del viaje!